La estación de la Pasión. Cuando
el mencionar o ver a ella se vuelve más que una obsesión, son casi movimientos
bruscos por buscarla y abrazarla que se convierte en la feroz batalla de dos
cuerpos que enteros se entregan al placer de amarnos.
La llama del fuego ambiente,
lugar de los colores más fuertes. Un verano la armonía entre el amor y el eros
todo mezclado, ese aroma a que todo es perfecto… Y más allá de ello no hay nada
en el tiempo.
Cuando las llamadas y dilemas
constantes, se vuelven ya un solo juego de niños. Ahora nos toca los besos y
caricias… Ahora el límite ya no es el cuerpo sino el alma y tu vida. No hay un
mañana solo un Hoy. No existen las ganas porque mis deseos todos los cumples a
la perfección. Y nadie recuerda nada a propósito, porque cada día es uno nuevo.
El perfecto paisaje playas y
arena blanca, porque el fuego de adentro esta que nos devora en una llama, de
tan intensos juegos, que ni el Sol puede detenernos. Y la noche quieres ser un descanso, pero no
lo permitimos porque para calentar este fresco ambiente lo llenamos de la
Pasión Ardiente, convertido en las batallas entre sabanas, en una banca, en una
cama o en el desván donde la obscuridad no ve nada.
Verano, por ser tú la más
febril estación, casi enfermo dejas a este corazón, no sé si de mal o de bien
pero sé que tampoco deseo apagarte, me condenas o me elevas tan maliciosa, pero
no perversa casi te vuelves pecado. ¡Pero que va no me interesa! Fruto de la Pasión
que queremos nos enloquezcas.
Verano
La fresca brisa…
Intenta calmar nuestros cálidos cuerpos
Y el Sol nos abraza con sus rayos desde lejos
Somos dos amantes que se cuidan
Que el sudor se vuelve en nuestro manto
Desnudos estamos en un alcor de verde llano
¡Mira el día Soleado!
Mi deseo de locura se vuelve alarde
El calor nos baña el viento no puede apagarte
Es tu ser y tu cuerpo terso
Mi alimento con el cual me sustento
Y de tu aliento soy tu dueño
Acaríciame con tus manos de luna
Y elevémonos con tu deseo de lujuria
En cantar de canarios
Es vil comparado a tus inventos
Cuando hablas, ríes y cantas a los vientos
Te preguntaras la falta de sombra
Se aleja y se torna en nada a esta hora
Pues nos abraza esquiva la total aurora
Sera ya de Noche o sigue siendo Día
Que noche no es más que obscuridad tardía
Y ya no siento más porque todo es Armonía
Verano candor de ambiente lento
Soplo de vientos frescos
Una luz tenue de luces y fuegos
Me preguntas si esto será eterno
No se cómo decirte que yo así lo creo
Y busco alegre una forma de verlo…
Si vemos al libro del cielo
Sus páginas blancas en el escribiremos
Te amo, serás para mí verdadero... ¡Amor de Verano Eterno!
Autor:
Marco León
P. D.: No se que pensar del Verano...
Es una combinación explosiva...
¡Gracias Paulo!
ResponderEliminarEspero que vuelva, muchisimas gracias por sus comentarios un gran abrazo desde Guatemala, ciudad de Eterna Primavera.